LOBO ESTEPARIO

28 DE MAYO 2012

NUEVAMENTE LA CUESTIÓN RELIGIOSA. EL ESTADO DE HIDALGO Y SU COMPROMISO MORAL.

 

Ya hemos escrito anteriormente acerca de la reforma del art24 Constitucional, de la que hemos dicho, que bajo el argumento de respetar y salvaguardar el derecho de las personas a profesar la religión que más les agrade o no adoptar ninguna, se esconde un poder más oculto que es destruir las bases Constitucionales de la separación histórica de iglesia y Estado.

Los defensores de esta reforma sostienen que el Estado no debe ser ateo ni anticlerical, ni represor de las expresiones de fe de las personas; personalmente consideramos que en principio el Estado Mexicano no es anticlerical pero si debe ser laico, es decir, existe una línea muy delgada entre la función de un estado laico y el anticlericalismo además de que no debe confundirse con la religiosidad. Esto es más que un juego de palabras, como hemos sostenido, la semiótica es sumamente útil para llamar a las cosas por su nombre y desde esta disciplina es un hecho que no existen los sinónimos: laicidad es no estar sometido a la autoridad eclesiástica de ninguna índole, es la completa autonomía y soberanía de un Estado para gobernarse a sí mismo, es al fin, la autodeterminación de un pueblo; la religión no es algo malo o negativo, es el intento siempre inacabado de unir lo inferior, lo mundano con lo espiritual como un camino a la perfección y muchos creemos en ese camino aun cuando la ruta sea una u otra, llámese budismo, cristianismo y un largo etcétera; clero, es finalmente el poder político, orgánico y económico que se encuentra detrás de la profesión de la fe, la más fuerte es la iglesia que se llama a sí misma santa y que es la católica, como la mas fuerte y extendida en todo el orbe, este último poder es el que debe estar separado del Estado, finalmente el Vaticano, sede de la iglesia es una Ciudad-Estado y su líder es sacerdote y jefe de estado, tiene su propia moneda y banco, en fin, es toda una potencia mundial en unas pocas hectáreas de territorio.

Por otra parte, mucho nos enorgullece hablar del señor Licenciado Don Benito Pablo Juárez García en los eventos políticos de marzo en la Plaza Juárez de Pachuca Hidalgo, misma que lleva su nombre y se encuentra una estatua colosal de tan magnífico hombre, además en las escuelas estudiamos su vida y obras pero en la realidad, su legado se ve opacado por personas que con conciencia o no, traicionan el esfuerzo de grandes hombres de intelecto y su propia sangre, hablando de los soldados, que dieron su vida por lograr esa separación de Iglesia y Estado en batallas legales con las Leyes de Reforma y batallas reales y sangrientas en la llamada guerra cristera, que conforme a las reglas de la guerra podríamos llamar de guerrillas orquestadas por el Vaticano.

Estos logros consumados y concretados en las leyes de reforma a través de las cuales el Estado recuperó el poder sobre registros del Estado Civil de las personas, defunciones, edificios sagrados, diezmos y finalmente se liberó de la influencia política de clero, se vio traicionada en Diciembre del año pasado cuando mientras todos estábamos comentando tanto en lo público como en lo privado sobre el suceso del candidato Peña Nieto acerca de los tres libros, la prole y la bola de pendejos como nos llamó su hija, en el Congreso de la Unión se cocinaba apresuradamente la reforma al artículo 24 Constitucional que bajo el disfraz de los derechos fundamentales y la libertad de creencias, se abría el paso para la injerencia de las iglesias en las cuestiones políticas del País, todo, para recibir al Papa con un desagravio por la guerra cristera y las leyes de reforma, el propio presidente se inclinó ante él y recibió la comunión como llaman a su ceremonia.

Hemos dicho que el presidente no podía permitirse esa libertad pero pues al final, hizo oídos sordos; la reforma federal requería el respaldo dela legislatura de los Estados y en el caso de Hidalgo, la reforma fue aprobada a principios del mes de mayo en el pleno del Congreso del Estado, de una forma casi automática y sólo con los señalamientos del PRD, fuera de ahí no hubo mayor problema.

Como decíamos en el encabezado de este artículo, el Estado de Hidalgo tenía un compromiso moral con la obra de Don Benito Pablo Juárez García en bien de la Nación y de nuestro Estado, de no aprobar esa reforma, pues el propio Estado de fue creado por decreto del entonces Presidente de la República Don Benito Pablo Juárez García, de fecha 15 de enero de 1869 publicado al día siguiente, designando a su Capital Pachuca y se le agregó “De Soto” en honor a Manuel Fernando Soto, originario de Tulancingo, por ser un gran impulsor en su creación; tomando parte del territorio de Estado de México y Querétaro para erigir este Estado que llevaría por nombre Hidalgo, por ser el iniciador del movimiento armado que a la postre conduciría a México a su independencia de la corona española; si no fuera por Don Benito Pablo Juárez García, este territorio no tendría autonomía, no habría autoridades políticas soberanas sino que seguiría formando parte de otros Estados, el compromiso moral al que nos referimos, es que en honor, gratitud, nacionalismo y compromiso histórico, debían honrar la obra Juarista y no aprobar la reforma.

Desafortunadamente no fue así y la reforma fue aprobada por la legislatura Estatal y en breve tendrá plena vigencia en todo el País, estamos en el proceso de regresión paulatino de la injerencia del la iglesia en cuestiones que solo competen a los Mexicanos, pero parece una tendencia inevitable de la cual sólo podemos ser espectadores.

Fulcanelli

fulcanelli_escritor@hotmail.com