GASTO SOCIAL

IEE: DESPOTISMO PARTIDISTA

 

Los atroces mecanismos de elección de los consejeros electorales del órgano hidalguense, muestran los mismos vicios que a nivel nacional, donde los partidos políticos, y no la sociedad, son los encargados de llevar a quienes conformarán el arbitrante de las elecciones, falsamente considerado un ente ciudadanizado.

Reducto de políticos sin chamba, neociudadanos que abandonaron las siglas de sus barcos políticos, así como de “chambistas” incondicionales de algún partido, el Instituto Estatal Electoral de Hidalgo, ha venido en una burda agencia de colocaciones, impulsados por el requisito de la Ley Electoral que no ha encontrado otro mecanismo de elección que no tenga relación con los partidos y sus intereses, administrados desde el Congreso del Estado.

Así, los partidos, en función de su peso siguen enviando aspirantes, o bien, abiertos lacayos para cumplir sus expectativas. Lo más cercano al cinismo lo es cuando tales personajes han militado directamente en esos partidos que los apoyan y que ahora dicen mantener distancia.

Los casos son innumerables, pero quien podría creer que Alejandro Soto, aquel que fue dirigente del blanquiazul, se haya deshecho de sus convicciones, lo mismo que el ahora consejero Jesús Alejandro Fosado Martínez, otro panista de cepa que han encontrado en la fachada de la “ciudadanización” el camuflaje de sus intenciones partidistas.

Llama ahora la atención la llegada a este órgano de altos mandos del Poder Judicial y hasta del Tribunal Electoral, que buscan tomar la dirección del IEE al que cada elección, sobre todo en casos cerrados, emergen sus errores, la laxa legislación al respecto, y sobre todo… La tendencia de sus consejeros.

Cada elección se convierte en la expiación de culpas de los partidos, en que una y otra vez las recriminaciones salen a flote y sin embargo, para esta nueva sucesión en el IEE poco se ha hecho por avanzar en que los partidos saquen completamente las manos de la postulación y aprobación de los consejeros.

Pende del árbitro electoral local un gran desprestigio y cómo olvidar todos los sucesos en que se han visto involucrados de manera más que oscura y que han puesto el dedo en la llaga en las reformas electorales que siguen siendo materia pendiente ante los tibios intentos de la llamada “ligth”, operada este mismo año, así como la del 2009.

Escándalos de filias políticas no pueden ser soslayados, como el del también ex perredista Francisco Ortega Sánchez, que pasó a ser de la noche a la mañana, “ciudadano” y secretario de ese organismo, el mismo que estuvo involucrado en la cuestión del transporte de material electoral y los dineros que no aparecían en el año 2010.

Pues, no hay forma por dónde se pueda quitar esos estigma que le cuelgan al IEE de Hidalgo y que sigue los mismos lastimosos esquemas operados en su similar, el Instituto Federal Electoral, donde la ciudadanización se ha vulgarizado en su peor forma. No hay que perder de vista al mismo Santiago Creel, y a otros consejeros que han salido para asumir cargos en administraciones abiertamente partidistas y con colores, algo inadmisible para quienes pretenden mantenerse al margen del nefasto sistema partidista.

Como sea, estamos ante la puerta de un perverso juego de partidos, en que se subastan los cargos por el peso de los partidos, dejando poca credibilidad ante la ciudadanía de que realmente vayan a servir a los intereses de la población y los electores. Las dudas subsistirán pese a los discursos y las palabras oficiales.

           

Cuentas claras: Surge una nueva campaña de la Iglesia Católica, esta vez contra el uso de preservativos de parte de la Secretaría de Salud, acción que según los religiosos fomenta la promiscuidad, pues se centra en el distintivo de “cargar condones en vez de una pañalera”. No es novedad esta situación para quienes se oponen a casi todo lo que huela a control natal, siguiendo con sus posturas arcaicas y anticientíficas, aunque según ellos, el asunto es la responsabilidad.

 

 

César Peña *

cesarpesa@hotmail.com, Facebook, twitter

 

* Periodista, investigador y economista