¿Quién extraña a Enlace?

27 DE FEBRERO DEL 2014

POR: César Peña *

cesarpesa@hotmail.com, twitter@tesaron, Facebook

Ahora que la Secretaría de Educación Pública ha anunciado que se dejará de aplicar la prueba Enlace en todos los niveles educativos, diversas voces se han dejado escuchar para protestar contra esta acción, que dicen, no permitirá contar con un instrumento de medición sobre los niveles de aprendizaje.

                Diversos organismos como Mexicanos Primero, aseveran que ahora no habrá con que medir los avances en la materia y reconocen que el hecho de que se haya corrompido no es motivo para eliminarlo, sino que lo pertinente era sanear los procedimientos para hacer más objetiva y realista la medición.

                Pero más allá de eso, la pregunta es, ¿algún día funcionó la prueba Enlace? Si nos remitimos a cada uno de los años en que se aplicó, la respuesta es clara: nunca  sirvió debido a su manipulación.

                Uno de los errores señalados, es que a los maestros cuyos grupos tenían buenos resultados, se les premiaba con incentivos económicos. Este “pecado original” de la medición, no es en sí la única causa de su inviabilidad, sino que deberíamos agregar todo lo que implicaba, tanto para las instituciones, como para los alumnos y mentores.

                Para nadie era un secreto que en Hidalgo, en municipios como San Agustín Tlaxiaca o la misma capital,  en algunas escuelas sólo se aplicaba el examen a los alumnos destacados o bien, los profesores y padres de familia que cuidaban les pasaban  las respuestas, dejaban “copiar” a los alumnos  y había una abierta complicidad entre estudiantes, paterfamilias y autoridades.

                Esta corrupción moral no tuvo límites, pues una escuela privada de la misma capital hidalguense, que año con año se colocaba el título de alto desempeño en esta prueba, hacía lo mismo sin mayor problema. Historias escandalosas de la misma tesitura se escribieron a lo largo y ancho del país sin que nadie pusiera un freno, se castigara a alguien o se incomodara siquiera algún funcionario.

                La prueba jamás sirvió de referente como lo niegan Mexicanos Primero, pero no sólo eso, sino que daba cifras irreales, falsas, sobre lo que sucedía en las aulas, por lo que no se debe extrañar algo que jamás funcionó, aunque por supuesto, este tema no tiene vínculo con la corrupción que no se ha ido del Sistema Educativo.

                Producto de este deslumbramiento mesiánico es que una revista calificó a una estudiante como la próxima Steve Jobs, algo atrevido en función del alto sesgo de error de la prueba, que por su carácter también homogéneo, desconoce las peculiaridades de cada región y que el país es una región de composición diversa que no incorpora precisamente la diversidad en la igualdad.

                La niña, muy capaz  - no lo dudo -, no fue capaz de pasar la primera ronda  de un concurso nacional de álgebra, revelando parte del garlito al que nos sometieron tantos años pagando cantidades millonarias para una medición totalmente estéril y antipedagógica.    

 

Cuentas claras: No es admisible, bajo ningún concepto que alguien que se diga Premio Nobel de la Paz como lo es Barack Obama, no solamente permita, sino que sea el brazo ejecutor de un asfixiante bloqueo económico contra Cuba y sus habitantes. Tampoco se entiende que siga con su guerra ideológica contra los hermanos Castro y el régimen socialista simplemente porque en un acto de dignidad no han aceptado al capitalismo y sus transnacionales.

Hay toda una discusión de fondo sobre este tema, pero hay quienes levantamos la voz para exigir el derecho de los pueblos a la libre autodeterminación sin que haya un policía mundial que diga a punta de garrote lo que se deba hacer políticamente.  

 

 

*  Periodista, investigador y economista