EDITORIAL

13 DE DICIEMBRE 2012

Está por terminar el año, los festejos empezarán en unos cuantos días más, los funcionarios recibirán sus aguinaldos que servirá para cubrir sus compromisos personales y familiares, pero los gobernantes ¿Qué cuentas entregarán a sus gobernados? Ese es el gran malestar que existe entre la sociedad, donde algunos Presidentes Municipales, durante este primer año se la llevaron en planear y planear y mal administrar los recursos del pueblo, las obras brillan por su ausencia; en el caso de Tulancingo donde la Administración que encabeza Julio Soto va en picada, aunque algunos traten de ocultarlo, la inconformidad de la gente va en aumento, por ningún lado se escucha un comentario a favor del Alcalde panista, al contrario, la queja crece y crece hasta de muchos que algún momento colaboraron para su Administración, la respuesta ha sido nula, la violencia azota las calles, el agua escasea, las “obritas” que se realizan son mínimas comparadas con lo que la gente esperaba del gobierno de Julio Soto, el final del 2012 es muy triste para los tulancinguenses, un Presidente incompetente y unos colaboradores mediocres, ese es el resultado de este año que está por concluir, un Tulancingo en pleno rezago y decadencia por el pésimo gobernante que hoy le toca llevar las riendas de un pueblo acostumbrado a crecer ¡Felicidades y hasta el 2013...!