¿HA CUMPLIDO...?

Por: Emiliano M. Sánchez

11 DE JUNIO DEL 2015

Principal

La Comisión Interamericana de los Derechos Humanos ya realiza el análisis en torno a la legalidad bajo la cual fue designado José Alfredo Sepúlveda Fayad como presidente de la comisión estatal y esta noticia causó simpatía entre las organizaciones civiles que en algún momento lo rechazaron por ser una auténtica imposición.

Tocado a la vieja usanza, este improvisado ombudsman todavía no entiende cual es su función. Se pasea en los eventos institucionales como si pudiera de esa manera difundir el valor que tienen los derechos humanos.

Esa comisión que pocas veces voltea a ver situaciones jurisdiccionales como esta, deberá ver la utilidad de este funcionario público y la forma en que llegó.

Lo cierto es que los encargados de observar su desempeño no tendrán que realizar muchas indagaciones, puesto que todo se encuentra públicamente sustentado en su propia página. Por ejemplo, en su cuenta pública de facebook cita que el 2 de junio quince agentes de la Coordinación de  Investigación recibieron el curso “El Derecho a la no discriminación”.

Allí se puede comprobar qué tan desviado tienen el propósito, puesto que esos señores no necesitan charlas sobre discriminación, necesitan sensibilizarlos sobre el terror de la tortura que se ha vuelto cosa común entre ellos, y muchos casos están fundamentados en las recomendaciones públicas.

Tan sólo hay que imaginar la cara de estos policías cuando les invitaban a no discriminar a un indígena o a un abuelo, cuando en sus manos se han cometido decenas de atropellos inimaginables.

Hay que recordar tan sólo al comandante de la Policía que en Huejutla ultrajó con un palo de escoba a un muchacho que fue a sacar a jalones y golpes mientras jugaba en unas maquinitas de video.

Que tan retorcida mente tiene este policía que no recibió más que una amonestación porque así lo pidió la Comisión que preside este “figurín” de ombudsman.

Acaso piensan que con conferencias de cuatro horas sobre la discriminación cambiarán esa mentalidad criminal que se ensaña con los más desvalidos para arrancarles culpabilidades que no cometieron o en su caso, dinero a cambio de su libertad.

¿No quizás sería justo que la CDHEH obligara de manera ejecutiva que todos los agentes tuvieran la obligatoriedad de cumplir con cursos para erradicar la tortura, que ya es un problema grave…?

Vamos, pero esas preocupaciones no están en el mundo de éste notable funcionario que buscó el encargo sólo para sentir parte del poder que brinda un cargo público, porque necesidad económica, le alcanza muy bien con su concesión de fedatario.

Tal vez llegue tarde la condena que haga la Interamericana para este mal ciudadano que aceptó un cargo a través de componendas, sin embargo, al menos su familia y sus amigos, conocerán que la sociedad que ha mostrado su repulsión por su persona y su tarea, tenía razón.

 

Ahora, sería oportuno saber cuál es la productividad que ha tenido esta CDHEH, puesto que ya llevamos más de la mitad del año y hasta el momento no ha cumplido con su obligación de emitir recomendaciones ¿Qué, nadie puede exigirle productividad?...