UN FRENTE OPOSITOR

Una grave escollo para conformar un frente opositor, sin duda serán las pugnas internas que se libran al interior del Partido Acción Nacional en donde  las acusaciones de traición menudean y los señalamientos de estar aliados todos con el grupo priista en el poder es cosa de todos los días.

La realidad electoral de Acción Nacional es por todos conocida, bien sabemos que no justamente se habla de una fortaleza y mucho menos de una generación de nuevos cuadros que permitan hacer crecer a éste partido que ve minada en cada elección su voto duro.

Y prueba de esa descomposición es la ambición burocrática mostrada por su dirigente estatal Azaél Sánchez Cerón, quien no quiso soltar la dieta como presidente municipal y pretende convivir en dos pistas su vida pública.

Este pequeño pero significativo detalle nos muestra la ausencia de valores o querencia por el blanquiazul, puesto que pretenden configurarse como unos profesionales de la política con errores como este.

Daniel Ludlow Kuri, de manera conjunta con una corriente de conservadores pelea la verticalidad en las acciones que debe asumir la dirigencia estatal, algo que cada día se convierte en tarea difícil debido a las grandes tentaciones que tiene esa posición.

Aquella voz que lanzó el dirigente al asumir la titularidad del panismo hidalguense de sumar a las distintas expresiones, al menos al bando perdedor encabezado por Alejandro Moreno Abud, se quedó en promesa.

Guillermo Galland, que fue uno de los activistas en favor de la reelección de Moreno Abud significa cabeza de un importante grupo que de ninguna manera comparte que la dirigencia estatal sea de “ratos” al tener que cumplir Azaél Hernández sus tareas de edil.

La conformación de un frente opositor que les brinde la posibilidad de reencontrarse con muchos de sus militantes perdidos, es una oportunidad cíclica que en esta ocasión tal parece que apuestan a perderla y no justamente por otra intención, sino de ayudar a que se mantenga el mismo estado de cosas en Hidalgo.

El hecho que la entidad esté considerado entre los últimos lugares en bienestar social y acceso a servicios indispensables como agua potable, drenaje, energía eléctrica, salud y seguridad, son carencias por las cuales deberían apostarle cualquiera que realmente tiene interés de coadyuvar en el mejoramiento del prójimo.

Los embates que dará el sistema priista de forma conjunta con el gobierno estatal en contra de un frente opositor será cada día más fuerte y ahí es donde será necesario conjuntar el esfuerzo de muchos para alcanzar un alternancia en Hidalgo.

Sin embargo, habrá quienes de manera cómoda decidan no meter las manos y dejar que las cosas pasen de nueva cuenta sin que haya un fortalecimiento de las fuerzas opositoras que alcancen un equilibrio en el quehacer público.

Aquí es donde los panistas deberán sacar las uñas y sumarse sin mediocridades a esta fuerza que logre tener una nueva visión de gobierno y no únicamente andar buscado chambas en todos los frentes como si eso pudiera coadyuvar a la vida democrática del Estado.